Recuerdo que Nay fue muy meticulosa a la hora de elegir cada aspecto de su boda, siempre quiso que sus proveedores fueran especiales y tuvimos la dicha de ser sus elegidos para hacer sus fotos, su sesión casual fue muy dinámica con una luz natural exquisita y tarde de su boda en el puerto de Veracruz estuvo riquísima, un calor agradable con un cielo completamente despejado que se lucía desde lo alto del hotel.
De Nay y Ricardo recuerdo perfectamente sus risas, casi las puedo escuchar de nuevo al ver sus fotos.
¡Gracias infinitas por su confianza!